Esta mañana se ha clausurado en la sede del Arzobispado, el curso de adaptación para los capellanes que se incorporan a nuestro arzobispado.
Este curso de formación se llevó a cabo en las dependencias del arzobispado y fue impartido por los Vicarios Jefes de Servicio y por personal de la Curia.
Los nuevos capellanes recibieron, a lo largo de estos días, formación relativa a enseñanzas sobre la estructura, funcionamiento y despliegue de las Fuerzas Armadas y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, así como sus obligaciones y funciones como componentes del SARFAS, resaltando la labor apostólica entre los hombres y mujeres de su jurisdicción y la especificidad de la pastoral castrense.
En este curso han participado los cuatro presbíteros que ingresaron mediante la última convocatoria en el Servicio de Asistencia Religiosa de las Fuerzas Armadas (SARFAS)
Antes de la finalización del curso, los cuatro nuevos capellanes han sido recibidos por el Arzobispo castrense, monseñor Juan Antonio Aznárez, antes de su incorporación a sus nuevos destinos las distintas parroquias y unidades dependientes de este Arzobispado castrense.
El Servicio de Asistencia Religiosa de las Fuerzas Armadas tiene su base jurídica en los convenios firmados entre el Estado Español y la Santa Sede (1979) y el Real Decreto 1145 de creación del propio Servicio fechado en 1.990, entre otras normas, fundamentadas en la Constitución Española de 1978 y Ley Orgánica de Libertad Religiosa de 5-8-1980 que equiparan a España con otros países que ofrecen a sus militares apoyo espiritual.