ASTURIAS – Exposición sobre el gran impresor Cristóbal Plantino en la biblioteca del Seminario Metropolitano

Comparte
De izqda. a dcha, Marta Querol, Covadonga Miravalles, comisaria de la exposición, José Antonio Bande, rector del Seminario, y Judith Hidalgo, responsable de la biblioteca. 

 

El 24 de octubre se celebra el Día de las Bibliotecas y la biblioteca del Seminario Metropolitano de Oviedo se ha unido a esta conmemoración con la exposición «LABORE ET CONSTANTIA: la imprenta plantiniana en la Biblioteca del Seminario Metropolitano de Oviedo», en la que se podrá ver una muestra de las obras que se custodian en los fondos de la biblioteca producidas por el afamado impresor francés del siglo XVI, Cristóbal Plantino. La exposición podrá visitarse del 21 al 25 de octubre de cuatro a siete de la tarde. La comisaria de la exposición, Covadonga Miravalles, y la responsable de la biblioteca, Judith Hidalgo, nos ofrecen todos los detalles.

¿Por qué habéis elegido a Cristóbal Plantino como protagonista de esta nueva exposición?

Covadonga: Fue uno de los más grandes impresores de todos los tiempos tanto por la calidad de sus ediciones como por el nivel de producción que llegó a alcanzar. Su obra y su vida fueron fiel reflejo de su propio lema, que da título a esta exposición: labor y constancia. Estos le permitieron superar unas difíciles condiciones vitales. Era un hombre de voluntad inquebrantable y un trabajador incansable y por muchos de sus contemporáneos era considerado como un hombre bondadoso y virtuoso. Su buen hacer dio además origen a una extraordinaria saga de impresores, los Plantin Moretus, cuya historia perduró por más de 300 años.

Estuvo muy relacionado con España y con Felipe II.

Covadonga: Empezó a trabajar en un proyecto que se llamó la Biblia políglota o Biblia regia y después continúo sus relaciones con España a través de diversos contratos.  Tanto él como toda su saga continuaron distribuyendo una gran cantidad de libros e inundaron el mercado español, sobre todo con los libros litúrgicos, los libros de nuevo rezado.

¿Cómo llegan sus ediciones a la biblioteca del Seminario?

Judith: La biblioteca del Seminario custodia donaciones fundamentalmente de sacerdotes. Como el Libro de Oficios era muy usado y ellos eran los que más imprimían ese tipo de obras, es probable que, por eso, las tengamos en la biblioteca. Por otro lado, en aquella época el obispo Quiñones adquirió bastantes obras de él y quién sabe si tenemos alguna obra en la biblioteca que le perteneciera. Encontrar estas ediciones ha sido posible porque cuando catalogamos los fondos vemos los exlibris y marcas de procedencia. Esta labor de estudio la comenzó D. Agustín Hevia Ballina y a mí me gustaría continuarla para descubrir este tipo de obras.

¿Qué piezas podremos ver en la exposición?

Covadonga: La exposición se divide en tres grandes bloques. En la primera vamos a acercarnos a conocer la vida del que fue el fundador de la Casa del Compás de Oro, Cristóbal Plantino. Las ediciones más antiguas que se conservan son dos obras de 1569 ;una de ellas es la edición princeps de la primera publicación del gran filólogo y humanista Justo Lipsio, que además fue un gran amigo de la familia, tenía hasta su propia habitación en la la casa taller de los Cristóbal Plantino. Aún se conserva y se puede visitar en el extraordinario museo Plantin Moretus de Amberes. De 1569 también tenemos una Biblia latina y de 1584 un ejemplo muy interesante de Biblia hebrea, en la que participó Benito Arias Montano, así como un diccionario de concordancias de 1585. En un segundo bloque recordamos a la importante saga de impresores y vemos algunos libros de las siguientes generaciones, que hubo hasta nueve llegando hasta el siglo XIX. Finalmente en un tercer apartado queremos tratar un poco más esas relaciones de la oficina plantiniana con España y  en concreto un viaje que hizo unos de sus descendientes, Balthasar Moretus Tercero, que estuvo casi tres meses en Madrid.

Una de las cosas que podemos destacar de Plantino, y por lo que se le considera uno de los impresores mas extraordinarios de todos los tiempos, es que alcanzó un nivel de producción industrial. Cuando produjo la Biblia Regia tenía 16 prensas funcionando y en aquella época se consideraba un taller grande aquél que tuviera cuatro: él llegó a tener casi treinta. Se mudó a Amberes, siendo de origen francés, porque la situación estratégica comercial que tenía allí le ayudaba a acercarse a un mercado supranacional. Él sabía que el sistema de producción que tenían era muy manual, en la época todavía se usaban las imprentas desarrolladas por Gutemberg. Una forma de amortizar y tener más ganancias era generar muchos libros y poder venderlos fuera de una forma más sencilla dentro de lo posible para la época.

The post Exposición sobre el gran impresor Cristóbal Plantino en la biblioteca del Seminario Metropolitano appeared first on Arzobispado Oviedo.