¡Querida familia parroquial, bienvenidos a un nuevo curso!
Damos gracias a Dios por el gran regalo de las vacaciones, que hemos podido disfrutar en familia, de la mano de nuestra Buena Madre, que nos ha cuidado y guiado estos tres meses de verano.
En octubre, volvemos a nuestra lucha diaria y a nuestro “Combate espiritual”. Hoy os traemos un libro cuya meditación y lectura pueden ayudarnos para “acercarnos a Dios hasta llegar a ser un mismo espíritu con Él (1Cor 6,17), siendo esta la empresa mayor y más noble que imaginarse pueda”.
Su autor Lorenzo Scupoli (1530-1610) a través de este libro, nos da un verdadero manual de estrategia espiritual. Manual de lectura constante de San Francisco de Sales y manual de espiritualidad cristiana esencialmente cristocéntrica, tan importante en nuestros tiempos, sin prescindir en ningún momento del significado de la cruz, que es renuncia y sacrificio.
Su autor sacerdote de la orden de los teatinos tuvo una vida marcada con sus vicisitudes y claroscuros, y en ningún momento pretendía que su obra viese la luz.
En esta obra el católico, camino de nuestra santidad, se da cuenta de la importancia de la gracia de Dios, pero siempre acompañada de un auténtico ejercicio de ascesis y una lucha contra las tentaciones y el pecado, tan denostado y poco considerado en nuestros días.
En esa batalla espiritual, muchas veces contra uno mismo, hemos de proveernos de cuatro armas imprescindibles para salir triunfantes en el combate:
· La desconfianza en nosotros mismos.
· La confianza en Dios.
· El ejercicio.
· La oración.
Os animamos a no caer en la tibieza, a seguir luchando en este nuevo curso que empieza y que mejor manera de hacerlo que con un manual para el combate.
“Hoy mismo vais a dar la batalla contra vuestros enemigos.
No desfallezca vuestro corazón.
No temáis, no tembléis,
Ni os asustéis ante ellos, pues el Señor, vuestro Dios,
Va delante de vosotros
Para combatir con vosotros
Y contra vuestros enemigos
y daros la victoria.”
Acudimos en esta empresa, a nuestra Santísima Madre, la Virgen María, seguro refugio, que sigue concediendo las gracias y misericordias.
Feliz y Santo Inicio de Curso.
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