Por cuarto año consecutivo, la Conferencia Episcopal Española nos propone la celebración de la Semana del Matrimonio, que se desarrolla en torno al 14 de febrero, día de San Valentín, y que este año lleva por lema Llena su corazón, hazlo latir. Una propuesta que viene desde un aula de la Facultad de Comunicación de la Universidad Pontificia de Salamanca. Porque este año, como novedad, el equipo creativo ha sido un grupo de estudiantes de Grado de Publicidad y Relaciones públicas, mientras que Ábside media producciones ha sido la encargada de la producción de la campaña.
Y por este motivo, con el fin de celebrar esta semana de homenaje al matrimonio, germen de la familia y de donde surge la vida, la Delegación de Familia y Vida de nuestra diócesis ha preparado un importante cartel de actividades que se han desarrollado a lo largo de esta semana.
El pasado lunes dio comienzo la actividad con una conferencia de nuestro Obispo, D. Arturo, que tituló «Familia, fuente de Esperanza» y que tuvo lugar en la Sala Manuel Sánchez Monge del archivo catedralicio. Una conferencia con guiño al año Jubilar, pero sobre todo una oportunidad para destacar el valor y la importancia de la familia, cuna de amor y generadora de vida. Una presentación a cargo de Justo Inguanzo y MariCruz Lorenzo, delegados de Familia y Vida, que han sido los encargados de preparar la semana junto al resto del equipo de la delegación diocesana.
Las actividades continuaron el miércoles, con una conferencia con Jon Elordui Urtuondo como ponente, titulada «Descubriendo las necesidades de la sociedad en un cambio de época». Elordui es director de la Fundación Lagungo, un servicio especializado en terapia familiar e individual, impulsado por la diócesis de Bilbao.
El jueves, alrededor de 25 matrimonios compartieron un rato de oración y celebración en la Casa de la Iglesia con una Cata-quesis. Una actividad que se ha celebrado también en otras diócesis de nuestro país, y que pretende favorecer un momento de encuentro distendido entre las parejas de novios y matrimonios. Acompañados de una cata de diferentes vinos, y tomando como hilo conductor para la oración y la reflexión el evangelio de las Bodas de Caná y fragmentos de la Exhortación Apostólica Amoris Laetitia del Papa Francisco, los asistentes compartieron experiencias y esperanzas acerca de la vida matrimonial y familiar.
El broche de oro a esta Semana del Matrimonio lo puso la oración de jóvenes en la catedral, a la que, en esta ocasión, se unieron las familias y en la que destacó el ambiente de oración y de reflexión en presencia del Señor y el sentimiento de agradecimiento en una semana tan especial. Asimismo, nuestro Vicario Episcopal para la Evangelización, compartió unas palabras con los asistentes, en las que hizo mención al Congreso de Vocaciones, celebrado hace una semana en Madrid, para animar a buscar la vocación que todos tenemos y a la que Dios nos llama.
Una semana marcada por el trabajo de la delegación de Familia y Vida, por la unidad entre delegaciones, como se demostró ayer en la catedral y por la calidad de las actividades planteadas, que aportan vida a nuestra diócesis y que generan ambiente de encuentro y fraternidad que, sin duda, colabora con el cumplimiento del objetivo principal de la Iglesia: el anuncio del Evangelio.
————————————————————————————————————————————————————————————
El anterior contenido fue publicado en: